miércoles, 5 de diciembre de 2012

Cómo me hice monja

Cómo me hice monja (Debolsillo, 2006)
por César Aira
Argentina, 1993

"Cómo me hice monja es mi autobiografía, parcial porque trata sólo de un año de mi vida, entre los seis y los siete, empieza cuando pruebo un helado por primera vez, y termina cuando me asesina la viuda del heladero."
(César Aira, desde la contrasolapa de su "autobiografía")
 
Cómo me hice monja, si no literalmente una autobiografía, es, digamos, una especie de Künstlerroman disparatada en que "el niño César Aira" cuenta una historia en que su yo femenino (o sea la niña César Aira) afirma narrar "la historia de 'cómo me hice monja'" (11) con una circularidad muy admirable e inventiva.  En otras palabras, es un dedo en los ojos del lector incauto y/o taradito.  La historia, o mejor dicho, la falsedad empieza cuando la supuesta narradora relata, en un comienzo a caballo entre la comedia y el horror, su inolvidable introducción al mundo de helado de frutilla a la edad de seis años.  ¿El giro imprevisto?  "Yo había sido víctima de los temibles ciánidos alimenticios... la gran marea de intoxicaciones letales que aquel año barría la Argentina y países vecinos" (26).  Aunque la niña sobrevive al envenenamiento después de un rato en el hospital, resulta que sus arcadas y su delirio se contagian a lo que queda de sus memorias: de hecho, el novelista se aprovecha de la situación para decirnos no cómo la niña César Aira tomó los hábitos sino sí cómo el niño César Aira aprendió convertirse en escritor en edad temprana (según cabe presumir, el pibe Aira ya era l'enfant terrible de su escuela y un bromista de primera categoría incluso en aquel entonces).  Por supuesto, un torrente de mentiras más una historia de venganza siguen según las reglas del juego en esta serie de besos mandada en honor del oficio de escribir y de la figura del narrador de poca confianza.  Beso #1: "Tendría que haber sido un monstruo para mentir por gusto" (15).  Beso #2: "El mentiroso experimentado sabe que la clave del éxito está en fingir bien la ignorancia de ciertas cosas.  Por ejemplo de las consecuencias de lo que está diciendo" (61).  Beso #3: "Todo este relato que he emprendido se basa en mi memoria perfecta.  La memoria me ha permitido atesorar cada instante que pasó.  También los instantes eternos, los que no pasaron, que encierran en su cápsula de oro a los otros.  Y los que se repitieron, que por supuesto son los más" (63).  ¿La moraleja? Confusion Is Sex.

el niño/la niña Aira

6 comentarios:

  1. I believe this book is already available in Portugal.

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    1. I think it takes about 20 years for most of Aira's books to make it into translation in the U.S., Miguel. This was one of the earliest ones, though.

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  2. Richard! Precioso este libro. Cuyas reflexiones se repiten hasta el hartazgo en sus otras novelas, dicho sea de paso.
    Saludos!

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  3. Ever, muy acertado como siempre, je je je. Aunque tengo que decir que estoy releyendo otra Aira, La Vida Nueva, qué está bien distinta que las otras que he leído hasta este punto: más afectuoso, incluso fraternal en cuanto a su retrato de su primer editor como novelista, el señor Achával de Achával Sólo. ¡Saludos!

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  4. Just finished Heinrich Böll's Group Portrait with Lady which is full of nuns and an 'author' who is very attracted to them. I'll finish a post on it some week soon. This sounds fun?

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    1. Look forward to checking out that review, Séamus. This Aira is fun, sure, but the first and last chapters of it are so strong that the middle sections feel a little disappointing in comparison (even though, oddly enough, the middle sections are what help make the book). I hope to read 3-6 new to me Airas next year, at least until I start running into any duds.

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